Recibo algunas quejas sobre mi bajo rendimiento en la red, así que sin extenderme demasiado en los detalles, quería mostraros algunos de los trabajos "ineludibles" que he estado haciendo en pequeños ratitos de paz que robo a mis tareas principales.
Esta marioneta de palo en realidad es la adaptación de otra marioneta muy similar de dragón que hicimos entre mi madre y ya para un taller de familias.
Es minimalista, pero precisamente por eso estoy muy satisfecha. La base de la cara la he realizado aprovechando los cartones de la fruta que protegen manzanas y melocotones.
En realidad es sólo una maqueta, falta pintarla y adecuar algunos materiales, pero os aseguro que en movimiento resulta bastante sorprendente: se hiergue como una verdadera cobra cuando se siente atacada. ¡Qué carácter!
6 comentarios:
He sido muy aficionado a las marionetas -cristobitas, decíamos nosotros- así que en lo que más me he fijado ha sido en el movimiento de cuello -da mucho juego- y en el proscenio con sus luces y estrellas.
Nuestros cristobitas eran el príncipe, la princesa, la bruja y sobre todo el demonio, rojo como un tomate.
Eres una artista, siempre lo digo, no me importa repetirme.
Besicos.
Gracias por los ánimos, falta me hacen, pues estoy perdiendo algo de ímpetu con tanto trabajo, pero de vez en cuando ya ves que no me puedo resistir...
No sabía lo de "cristobitas". Tu comentario es una delicia.
...
Un abrazo, Thornton.
Menos mal que tiene una cara bien simpática, no obstante ser cobra y, por tanto, serpiente, puaggg, terror ancestral del género femenino.
Is@Hz, tú a tu aire, que no siempre podemos ir al son que nos tocan o que los demás pretenden. Lo fundamental es que cojas el blog con ganas, no como una obligación.
Ah, que se me olvidaba decirte que ha quedado estupendo el muñeco, todo un cistobita, como dice el Presi, y se les llama en esta tierra.
Un besazo muy grandote, así que, con dos aumentativos, será inmenso.
Isabel, la verdad es que ganas no me faltan, tengo tres o cuatro cosillas hechas pero no consigo el tiempo para revisar o hacer las fotos y postearlas. Y en el fondo que así siga y que el trabajo no falte pero ya se sabe que (adaptando el refrán) no llueve la cantidad que a uno le resultaría ideal...
Gracias por tu visita, fiel amiga.
Tu destreza es mágica amiga. Sabes sacarle el jugo a las cosas sencillas y eso tiene mucho mérito.
De vez en cuando me asomo para ver tus trabajos,hoy me he decidido a comentar.
Besicos.
Gracias, Cabopá. Entiendo que es blog más para ver que para comentar, pero siempre es un placer tener visitas que animan a seguir con una ilusión añadida.
Un besico.
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