En el supermercado de casa han cambiado el aspecto de la garrafa de agua y mi cabeza no para de pensar, sobre todo porque ahora es de color azul, una maravilla! Sé que la cosa no quedará aquí, pero por ahora os muestro una lámpara reciclada muy cromática y alegre.
Algo de trampa ciertamente he hecho, porque no he encontrado ningún portalámparas por casa y me he visto obligada a desmontar una de IKEA que funcionaba perfectamente. ¡TRAICIÓN!
Cualquier duda sobre la confección..., planteármela en los comentarios, pero yo creo que es bastante evidente.